En 1988 Daína Chaviano publicó su primera novela, Fábulas de una abuela extraterrestre, en Letras Cubanas, una de las editoriales más importantes de Cuba. Chaviano ya era una figura conocida en el mundo literario y cultural de la isla con la publicación previa de las colecciones de cuentos Los mundos que amo (1980), Amoroso planeta (1983) e Historias de hadas para adultos (1986), así como por ser asesora cultural del taller literario de ciencia-ficción y fantasía Óscar Hurtado, y al aparecer en televisión como presentadora de películas de ciencia-ficción. Fábulas... debe ser considerada la obra de madurez de Chaviano antes de salir de Cuba. La novela recibió además atención internacional, ganando en 1990 el Premio Anna Seghers para escritores latinoamericanos otorgado por la academia de Bellas Artes de Berlín, éxito totalmente inusual en las letras latinoamericanas de ciencia-ficción de la época.
Fábulas... nos propone un universo en el que todo es uno, pero un “uno” que no es único ni univalente. Consecuentemente, la ciencia-ficción tampoco puede ser un género al que le valgan las definiciones tajantes más cientificistas, ya que es un género cuya fundamental cualidad la conforma su hibridez entre lo científico, lo especulativo y lo fantástico. Fábulas... es así, y es por ello, un texto que, según el lector, pertenece al género de la ciencia-ficción tanto como al de la fantasía, y al resultado híbrido de ambos. Esta hibridez, esta inteligencia para desbordar las fronteras hace de Fábulas… una de las obras más logradas e importantes de la prosa cubana —tanto en lo formal como en lo argumental— en la década de los ochenta. (Texto completo en PDF).